Comisión del Congreso de los Estados Unidos (USA) enfocado a
la Industria del Aluminio
En agosto de 2013, los diputados Larry Bucshon (R-IN), Suzan
DelBene (D-WA), Bill Johnson (R-OH), y Bill Owens (D-NY-Retired) formaron el
congreso bipartidista Comisión del Congreso de los Estados Unidos de la
Industria del Aluminio , “Congressional Aluminum Caucus”.
El “Congressional
Aluminum Caucus” sirve como un foro excelente para aumentar la conciencia de importancia
de la industria del aluminio en los Estados Unidos, y de todos los aspectos de
la producción y el uso del metal, desde la minería hasta la fabricación y el
reciclaje.
Un “caucus” es un foro formado por miembros del Congreso para
que puedan discutir temas específicos, o temas de la agenda parlamentaria.
En
el Congreso Norteamericano hay varios tipos de “caucuses”, que van desde el interés
político partidista, hasta temas de interés especifico, como este de la
Industria del Aluminio.
El “Congressional Aluminum Caucus” es un grupo de interés donde
los miembros discuten los problemas que enfrenta la industria del aluminio, así
como el diseño de políticas de incentivos para su crecimiento.
Este “Congressional Aluminum Caucus” nace como respuesta a
que la industria moderna del aluminio ha sido una parte vital del sector
manufacturero estadounidense por más de 100 años, y es un material clave para
el siglo XXI. De hecho, el aluminio se utiliza en literalmente cientos de
aplicaciones, desde latas de aluminio, los estadios de fútbol, a las partes de
los aviones.
Con instalaciones en casi todos los distritos del Congreso,
la industria del aluminio apoya cerca de 713,000 empleos en Estados Unidos, y
contribuye con 186 mil millones de dólares en actividad económica a nivel
nacional, de ahí que el Congreso Norteamericano haya creado una comisión
especial que se dedique específicamente a este tan importante bastión de la economía
del pueblo norteamericano, con especial énfasis en informar y educar a los
principales responsables de la política federal sobre los problemas críticos
que enfrenta la industria, y la necesidad de diseñar políticas para promover el
crecimiento de esta industria, así como de su interacción con diversos sectores
de la industria de manufactura.
Dada las ventajas comparativas de Venezuela para la explotación
comercial, de manera integrada y eficiente, de este sector industrial, es interesante
considerar esta decisión del Congreso Norteamericano, y contar en nuestro país
con mayor dedicación de los Poderes Públicos en cuanto al diseño de políticas públicas
que permitan que la industria nacional del aluminio ocupe el lugar mundial que
está llamada a esgrimir, y especialmente, a consolidarse como un importante bastión
de nuestra economía, y motor de desarrollo económico y social.
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